
El emociómetro es una herramienta muy potente para educar con inteligencia emocional, ya que permite a los niños reconocer la emoción y observan como el estado anímico sube y baja como un termómetro. Son personalizados con el rostro de cada miembro familiar y podrán llevarlo consigo a cualquier lugar.
QUE CONTIENE LA CAJA CON EL EMOCIÓMETRO
-
Guía para manejar las emociones con 5 pasos básicos.
-
Decálogo de la paciencia para el adulto.
-
Comic con escenas del día a día con frases positivas para fomentar el dialogo
-
Emociómetros con el rostros de los miembros de los núcleo familiar de cinco emociones: alegría, tristeza, ira, llanto y miedo.
-
Tarjetas con acciones positivas para calmar las emociones que generan malestar.
Pasos para utilizar cada herramienta






¿Cuándo y cómo se utilizan?
Cuando el niño o el adulto experimente un cambio emocional o de forma rutinaria cuando el niño regrese del colegio o antes de acostarse para que ambos, adulto y niño, expresen cómo se sintieron durante el día.
Para utilizarlo primero el adulto ayudará al niño a que identifique y reconozca su emoción. Para lograrlo debe escucharlo y buscar comprender porque se siente de ese modo (con la guía de 5 pasos básicos te enseñaremos como hacerlo de forma positiva). Segundo, utilizar el emociómetro para identificar la emoción que se está experimentando. Tercero, si la emoción genera malestar se recurre a las tarjetas con las acciones positivas para calmar los ánimos y controlar la emoción juntos. Cuarto, luego de que el niño está calmado se procede a reflexionar lo sucedido tranquilamente, fomentando el diálogo, recompensándolo por su esfuerzo en manejar la emoción y finalmente observa si la emoción baja retornando a la calma o a la alegría.